Si te encanta ir de compras y tu sentido de la moda es superior, podrías estar ganando dinero por hacer compras todo el día, ¿No suena genial?
En eso consiste el trabajo de los personal shoppers o asesores de compras.
Aunque no lo creas, hay personas que no disfrutan el ir de compras o, para las cuales, su sentido de la moda no sobresale demasiado, es ahí cuando se ven en la necesidad de contratar una persona que les ayude con las compras y con su imagen personal en general.
Para incursionar en este negocio es fundamentar tener conocimiento de moda, diseñadores, tiendas, productos, estilos e incluso fabricantes y tiendas de textiles.
Tener estilo puede no ser una prioridad para todo el mundo o, simplemente, no pagarían por un servicio así, sin embargo, hay profesiones para las cuales la imagen tiene un peso muy grande y es necesario lucir bien todo el tiempo. Este tipo de servicio también puede ser contratado por futuras novias, graduandos, viajeros, cambios de temporada o, asistentes a eventos.
Por el hecho de ser este un servicio personalizado, los dividendos y ganancias son bastante buenos, los cobros se pueden realizar por horas, por proyecto o con una tarifa fija mensual o semanal, todo depende del cliente y las características del acuerdo.
La publicidad (y status) de un personal shopper se gana con el boca a boca y las recomendaciones de sus clientes, además de la asistencia a eventos y el networking.
Sin duda, un trabajo que las adictas a la moda y las compras amaríamos tener.