Estos aparatos electrónicos portátiles son la “mano derecha” de muchas personas. Conoce qué tipos de calculadoras existen y cuál deberías comprar.
Las calculadoras son electrónicas y son fabricadas por numerosas empresas en tamaños y formas diferentes. A continuación te explicamos las más usadas y vendidas en el mercado.
Calculadora de bolsillo
Tienen una fuente de energía, como una pila, un panel solar o ambos; una pantalla, normalmente LED o LCD, capaz de mostrar cierto número de dígitos (habitualmente 8 o 10); un teclado formado por diez dígitos, del 0 al 9; las cuatro operaciones aritméticas (suma, resta, multiplicación y división); un botón «cancelar» para eliminar el cálculo en curso; botones de encendido y apagado; y otras funciones básicas, como la raíz cuadrada y el porcentaje (%).
Calculadora financiera
Cumplen con las mismas funciones de una calculadora de bolsillo, pero con la capacidad para hacer cálculo de bonos y de depreciación, cálculo del punto de equilibrio y doble alimentación, amortización de préstamos, cálculo de márgenes y de interés compuesto.
Calculadora científica
Los modelos más complejos, habitualmente llamados «científicos», permiten calcular funciones trigonométricas, estadísticas y de otros tipos. Las más avanzadas pueden mostrar gráficos e incorporan características de los sistemas algebraicos computacionales, siendo también programables para aplicaciones tales como resolver ecuaciones algebraicas, modelos financieros e incluso juegos.
Calculadora electrónica
Se diferencian en esto de otros tipos de calculadoras que acumulan y manejan los datos numéricos en forma de cantidades físicas, por ejemplo, potenciales o resistencias eléctricos. Llámase programa a la sucesión de instrucciones acumuladas en la calculadora y por las cuales ésta se rige.