Con respecto al proceso de Compra de sentencias, se demostró que el 2% se redujeron las demandas contra el Estado en 2019, con un total de 399.048 procesos judiciales activos. Esto, representa cerca de $424 billones, valor que afecta la deuda del país y por ende el presupuesto de otras dependencias.
Casos como los falsos positivos, víctimas del conflicto armado o de entidades como el INPEC, Fiscalía, Policía e Invías constituyen esas deudas de la Nación, siendo el Ministerio de Defensa el que representa la mayor parte; inicialmente se proyectaba que los pagos de estos fallos que oscilan entre los 50 millones y mil millones de pesos, se realizarán en un plazo no mayor a 24 meses por cada proceso. Hoy están tardando de 4 a 7 años; una de las razones del pago tardío es la reducción del presupuesto en cada entidad para este concepto.
Esta demora en los desembolsos hace que el beneficiario se vea afectado una vez más, por eso que Conactivos, una empresa que compra sentencias de reparación y con el fin de dar agilidad a la liquidez de la víctima, hace que el proceso que antes llevaba un tiempo de 5 años o más, se vea reducido a un periodo entre 1 a 3 meses.
Para Adriana Duarte, Directora Jurídica de Conactivos “Hay ocasiones en que los favorecidos, no alcanzan a ver el dinero, nosotros compramos ese proceso y le desembolsamos de una manera transparente y ágil”.
Para Duarte, “Cerca del 80% de personas que nos vende sus sentencias viven en zonas vulnerables y son de bajos recursos; Y a través de Conactivos han logrado suplir necesidades, además de mejorar su calidad de vida; hay algunos casos que pudieron pagar tratamientos de cáncer que son costosos o adquirir vivienda propia, gracias a que ya cuentan con esa liquidez”.
Al 2020, Conactivos ha comprado cerca de 1.500 sentencias, 100% de esas personas cuentan hoy con solidez financiera “nuestro principal objetivo es remediar en parte el daño que sufrieron estas personas, que en ocasiones es la pérdida de un familiar, el dinero no compensa está situación, pero si mejora en parte su calidad de vida”, concluye Duarte.